divendres, 11 de febrer del 2011

Robsten FanFic "Los sueños se hacen realidad"- Capítulo 8

DESPUÉS DE TODA LA LOCURA
Habían pasado muchos meses y también muchas cosas, Rob ya había superado lo de su abuelo, tenía 18 años, ya habíamos rodado Crepúsculo, y sinceramente había sido la mejor experiencia que había tenido en toda mi vida, la película había tenido muchísimo éxito, algunos críticos decían que era la mejor película de vampiros que nunca se hubiese hecho, tenía millones de fans y los paparazzi todos los días me perseguían, se podía decir que había conseguido el éxito, era famosa.
Rob, Taylor y yo no habíamos parado de promocionar la película, de hacer entrevistas, hacía semanas que no veía a nadie del reparto, se acabó la promoción y ya no nos veíamos tanto, aunque seguíamos hablando entre todos por teléfono cada día, éramos como una gran familia...Faltaban algunas semanas para empezar a grabar Luna Nueva… todos estábamos muy emocionados, y quedábamos más a menudo.
Hoy, como en los viejos tiempos, Rob y yo habíamos quedado para ensayar el guión, pero esta vez de Luna Nueva...Faltaban diez minutos para que llegase...antes, también quedábamos para ensayar en algún parque, o un restaurante, pero ahora es imposible, hay paparazzis por todos lados, así que sólo nos quedaba mi casa o la suya.
Me senté en el sofá y por falta de diversión mi mente empezó a vagar.. Anna se había olvidado de mi completamente, desde que soy famosa, me evita, sinceramente me daba igual, tenía amigos de sobra...No había vuelto a ver ni hablar con Michael, al parecer me había hecho caso y se había ido de mi vida.
Ayer quedé con Taylor, Nikki, Ashley y alguien más, hacia semanas que no los veía y me lo pasé muy bien, Rob no pudo venir, por eso hemos quedado hoy; hace semanas que tampoco lo veo, sólo hablo con él muy a menudo y...le echo de menos.
No nos costó mucho hacer las escenas más íntimas, las de los besos y otras cosas, sinceramente salió todo muy natural...y todo el mundo se quedó con la boca abierta al ver nuestra química...eso mejoró nuestra relación ahora éramos amigos inseparables, y nos queríamos mucho mutuamente...
Sonó el timbre, Rob ya estaba aquí, saí de mi estado de enbobación y abrí la puerta, me miró y sonrió, el también me había echado de menos.
-¡Kristen!
-¡Rob!
Nos abrazamos y empezamos a reír.
Empezamos a memorizar el guión a hablar, a reír, le invité a comer y probo mi pastel de tortilla, lo habíamos pasado bien pero se estaba haciendo tarde, muy tarde...
- Bueno me ha encantado venir, quedaremos otro día, ¿vale?- dijo Rob en el umbral de mi puerta
- Claro
- Te llamaré, adiós
- Adiós
Antes de cerrar la puerta vi a Ash al otro lado de la carretera estaba dispuesta a pasar, vi un coche a mucha velocidad, grité a Ash pero no me escuchaba, empezé a correr hacia ella...
- Kristen ¡NO!- gritó Rob demasiado lejos como para que yo pudiese reaccionar

Abrí los ojos, estaba en un hospital, vi a mis padres, a mis amigos, a Taylor y también a Rob, estban todos mirándome...
-¿Que tal estás?- preguntó mi madre preocupada
- No estoy muy segura, ¿que ha pasado?- dije muy confusa
Ashley me miró con cara triste.
- Lo siento mucho, fui una imbécil, estaba a un lado de la carretera, delante de tu casa, quería ir hacia ti y salí corriendo, no me di cuenta de que venía un coche, tu gritaste, me decías que me quedara quieta y así lo hice, me quedé parada en la cera antes de cruzar, seguramente tu no me viste por qué seguiste corriendo hacia mí, el coche siguió avanzando y... te atropelló- dijo ella con la cara abatida
-Tranquila Ashley estoy bien, no estés triste... ¿Cuánto tiempo he estado aquí?- pregunté a mis padres
Pero Taylor es quien contestó:
-Sólo un día, el coche te tocó de costado y te diste en la cabeza al caer al suelo, tienes una contusión, no es grave, pero has estado un día inconsciente...
-Vaya
Entró una enfermera en la habitación, se quedó sorprendida al ver tanta gente, al final me miró y me dijo:
- Como has despertado, ya te podemos dar el alta, tienes que tomarte las pastillas contra el dolor después de cada comida, si sufres mareos o mucho dolor, no dudes en volver a venir, pero lo más importante, ¿que tal te encuentras?- al acabar la pregunta, todos los presentes en esa habitación fijaron la vista en mí
- Bien, solo un poco confusa, no noto casi el dolor de cabeza- dije mientras me incorporaba lentamente
- Perfecto, estás lista, voy a llamar al doctor, vamos a darte el alta

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