diumenge, 17 d’abril del 2011

Robsten FanFic "Los sueños se hacen realidad" Capítulo 43

REENCUENTRO
- Nos veremos en muy poco tiempo, te lo prometo
- Lo sé, adiós
- Adiós

Las palabras de Rob retumbaban en mi cabeza, me desperté de golpe. Estaba en el avión, nadie se había percatado de mi repentino sobresalto así que volví a cerrar los ojos, respirando hondo. Podía sentir el olor de Rob proveniente de la camiseta que me había dejado, eso me hacía sentir más tranquila, era como si lo tuviera más cerca de lo que estaba realmente.
- ¿Estás bien, Kristen?- dijo John
- Em... Sí, por supuesto- dije yo con voz ronca, ni me acordaba de que mi guardaespaldas había viajado conmigo y eso era una suerte, me lo jugaba todo a que habría alguien esperándome en el aeropuerto…
John me miró desde el asiento de detrás no muy convencido de mis palabras…
- Estoy cansada, solo es eso- le tranquilicé
Él se levantó y se sentó a mi lado:
- Kristen, verás a Rob dentro de poco, no tienes ningún motivo para estar así…- me dijo él, yo le miré de reojo
- Me conoces demasiado bien, John- sonreí
- Lo sé…- el también sonrió
A pesar de su intento de tranquilizarme, me puse nerviosa, ya se podía ver el aeropuerto desde la ventanilla, tendría que enfrentarme a paparazzis dentro de poco...
Por fin el avión paró, John me ayudó con la maleta y salimos de allí apresuradamente, mis temores se habían cumplido, podía visualizar a cuatro paparazzis a quince metros delante de nosotros, detrás de ellos había muchos más…:
- Como siempre, Kristen, rápido y sin hacer caso- me dijo John, muy serio
Vamos- dije, suspiré hondo y empezamos a andar, casi correr
A pesar de mi inútil intento de esconderme y de mis oscuras gafas, podía sentir flashes en mi rostro. Detrás de mí, se oían susurros y gritos de las adolescentes que me veían pasar.
- Vamos, entra- John me ayudó a entrar en el coche y arrancó deprisa
Yo suspiré hondo como siempre hacía después de situaciones así.
- ¿Dónde te llevo, a tu casa, la de tus padres o la tuya y de Rob?- preguntó John
- La de mis padres, hace mucho que no los veo
John sonrió y dio media vuelta.

- Muchísimas gracias, John- le dije mientras salíamos del coche
- Es mi trabajo, Kristen- sonrió y me abrazó, yo se lo devolví, le tenía mucho aprecio a este grandullón
Cogí mi maleta y caminé hacia la puerta:
- ¡Kristen!- me recibió mi padre y fui directamente hacia sus brazos, me había echado de menos al igual que yo a él
- Cariño, ¿cómo estás?- me dijo mi madre después de que hubiera saludado a mi padre
Le sonreí y la abracé fuerte, echaba de menos sus consejos, bueno, la echaba de menos a ella. Me devolvió el abrazo y caminé hacia el salón, mis tres hermanos estaban levantados viniendo hacia mí. Salté como una niña pequeña y fui corriendo a abrazarlos, hacía muchísimo que no los veía. Después, nos sentamos en el salón y una preciosa gatita saltó en mi regazo:
- ¡Jella!, te echado de menos pequeña- le dije mientras la abrazaba
Todos rieron al unísono, y yo por fin, suspiré tranquila.
- ¿Qué hacéis aquí?- pregunté mirando a mis hermanos
- ¿Creías que nos habíamos olvidado de ti?, sabíamos que vendrías hoy, hemos venido a verte, tanto rodaje, tanto Rob, tanto Tom, tantas premieres, tantos premios… ¿Y nosotros qué?- dijo Dana sonriendo
- Tengo mucho trabajo, ¿qué queréis que haga?- les dije acariciando a Jella
- ¿Dónde está Rob?, me cae bien este chico- dijo Cameron
- En Londres, rodando Bel-Ami…- dije suspirando
- ¿En serio?, no lo sabía- dijo él
- Normal, no tenías porque saberlo, hace tiempo que no hablo contigo - le dije, soné borde aunque yo no quería
- No se refiere a eso, se pone al día de tu vida leyendo- dijo Taylor riéndose
No me lo podía creer, la vaga imagen de Cameron leyendo ese tipo de cosas me hacía reír, pero eso dio paso al enfado les había dejado claro muchas veces eso, me levanté del sofá y Jella saltó asustada:
- Cameron, ¿estás diciendo que lees revistas de esas que hablan sobre mí?- le pregunté casi gritando
- Puede- dijo él sonriendo
- Vale, esto va para todos, está totalmente prohibido leer revistas de cotilleo en esta casa, desde que el abuelo creyó que estaba embarazada que os lo estoy diciendo- dije y me volví a sentar
Todos rieron, mis hermanos reían a carcajadas, lo del abuelo fue muy gracioso.
- No, os lo digo en serio, si queréis saber algo de mí, llamad, os responderé encantada- dije cogiendo a Jella del suelo
Asintieron todos, no quería hablar de eso, solo hacía que recordarme a Rob… ¿Qué estará haciendo ahora mismo?
- ¿Y cuanto te quedarás, cielo?- preguntó mi madre
- ¿Acaso tiene que irse? ¿Empieza a rodar Amanecer en Noviembre, no?- preguntó Taylor
- Ya me gustaría tener siete meses de descanso, Taylor, pero no, me han ofrecido rodar otra película en verano… Además le he prometido a Rob que pasaríamos mi veinte cumpleaños juntos…- dije
- ¿Qué película?- preguntó Dana
- On The Road… Tom también estará en la película, ya he aceptado- dije mirando al suelo… Lo que me había costado aceptar…
- ¿Y cuanto te quedarás aquí?- insistía mi madre
- Una semana a lo sumo, me han invitado a los Oscars, además tengo la premier de The Runaways esta semana también…- dije, no podía descansar ni una semana seguida, era imposible
Todos se quedaron callados, hacía mucho tiempo que no los veía y yo respondía fugándome a la semana que pasaba con ellos… Era injusto, pero tenía que trabajar, me ganaba la vida en eso.
- ¿Puedo quedarme aquí verdad?- les pregunté a mis padres
- ¡Por supuesto!- dijo mi padre sonriendo
Mi móvil vibró en el bolsillo de mis tejanos, me levanté y pulsé el botón verde, sin mirar el número:
- ¿Sí?
- Kristen- me dijo Rob dulcemente
- ¡Rob!- grité
- Hola pequeña, ¿qué tal el viaje?- preguntó, parecía preocupado
- Bien, ¿por qué?- le pregunté
- He visto las fotos del aeropuerto, no sé, parecías muy seria- dijo él
- No, estaba bien, pero ya sabes que no me gusta ser el centro de atención- le dije suspirando
- Lo sé- dijo
- Y, ¿qué tal en Londres?
- Genial, ya sabes cómo me gusta estar aquí…
- Te echo de menos
- Lo sé y yo también…- escuché un ruido al otro lado de la línea- Cariño, tengo que ir a rodar otra escena, te llamaré
- Vale, te quiero Rob
- Te quiero Kris, adiós
Colgué y suspiré hondo, habíamos hablado poco, pero suficiente, me había dicho que me llamaría así que ahora tocaba tener paciencia… Y lo más importante, tenía que descansar, hacía demasiados meses que no lo hacía.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada